Las excavaciones llevadas a cabo por arqueólogos de la Academia Rusa de Ciencias en la región de Siberia han sacado a la luz un extraordinario hallazgo: unos restos óseos que podrían pertenecer a un “auriga” de hace 3.000 años. Junto a él había un extraño objeto de bronce que los arqueólogos han definido como un “cinturón de auriga”, un elemento que resultaba imprescindible para conducir un carro.
https://historia.nationalgeographic.com.es/a/descubren-entierro-auriga-3000-anos-antiguedad-siberia_19953